de Marutopia
Recuerdo el verano
en que me vestía con tu nombre
y saboreaba tus labios bestialmente.
Pero ahora tu nombre
arde como metal en proceso.
Arde,
destripándose en mi lengua,
sudada de decepción.
Galopando
frente a los espejos del mundo,
sobre tus palabras sin peso.
Comiendo frutas
colgadas entre telarañas tejidas con ego.
Dibujando sobre almas que respiran jardines de papel glasé.
Nada más que una cuchillada al ser, recuperable,
nada menos que un homicidio de corazones.
Este obra está bajo una licencia de Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 4.0 Internacional.